La oración: Un poder transformador (Parte 2)

Hechos 12: 1 al 19

En el versículo 6 encontramos una de las noches mas negras de la vida de Pedro. Al otro día iba a ser expuesto al pueblo para ser eliminado, la hora se iba acercando, pero la Iglesia seguía orando. SIGUE ORANDO AUNQUE LA SITUACION ESTE AL LIMITE.
Pedro estaba rodeado de sus enemigos, entre dos soldados, atado con cadenas y guardas cuidando las puertas de la cárcel. Piense por un momento, ¿qué posibilidad natural habría de que Pedro escapase de esta situación? Ninguna.
Pero si había una posibilidad sobrenatural: LA INTERVENCION ANGELICAL.
Cuando este pasando situaciones limite, no solo ore a Dios, ¡active los ángeles a su favor!
(Salmos 103: 20). La Biblia nos enseña que los ángeles son espíritus al servicio suyo y mío. Ellos están para protegernos, defendernos y traernos bendiciones. Active sus ángeles, quizás estén aburridos porque usted no los hace trabajar.
El versículo 7 dice que apareció un ángel en la celda y despertó a Pedro. Su misión era guiarlo para que salga de ese lugar y de esa forma salvarle la vida.
¡LA ORACION DE LA IGLESIA ESTABA CAMBIANDO LOS PLANES DEL ENEMIGO!
El ángel le ordeno a Pedro que se levantara, y cuando el obedeció las cadenas se cayeron sus manos. Después le ordeno que se vista y se ponga sus sandalias y lo siga. Pedro obedeció, siguió al ángel, paso entre los soldados y la puerta de la cárcel se le abrió solita, ni siquiera la empujo. ¡Alcanzo su libertad!
Si usted esta orando por un milagro debe saber que SU ORACION DEBE IR ACOMPAÑADA DE UNA ACCION.
El ángel podía haber llevado a Pedro en sus brazos hasta la puerta, sin embargo lo obligo a realizar algunas acciones específicas. Quizás usted deba cambiar algo: sembrar más en su iglesia, ser más eficiente en su servicio, seguir los consejos de sus líderes, tener más humildad. Lo que Dios le este demandando hágalo.
ORE, ACTIVE LOS ANGELES Y ACTUE.
 Fue tan grande el milagro de Pedro que cuando llego a la casa nadie podía creer que estuviera libre.
A usted le pasara lo mismo, será tan grande tu milagro que los demás no creerán que alcanzo aquello por  lo cual estaba orando.
¡Siga adelante porque hay respuesta a la oración!

Pra. Lidia Diaz

 

 

 

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